martes, 30 de septiembre de 2025

LA CREACIÓN

La Biblia dice que Dios creo el universo en seis días ¿Entonces cómo podemos hablar siendo católicos y creyentes de los millones de años y de los miles de millones de años que dice la ciencia tardó en hacerse el universo?

 En primer lugar, lo más importante que hay que tener en cuenta es que la Biblia no nos enseña ciencia. Como decía ya San Agustín “la Biblia no nos dice cómo van los cielos sino cómo se va al cielo” que es más importante. Por lo tanto, ni le podemos pedir a la Biblia que nos enseñe ciencia, ni le podemos pedir a la ciencia que nos enseñe teología. Son dos maneras parciales de conocer, pero no abarcan todo.

En segundo lugar, la Biblia se escribió para enseñar ideas de valor teológico a gente que no tenía ninguna base científica. Hablarles de microbios hace 5000 años a los nómadas de Palestina sería como hablar en chino a un español. Hablarles de las fuerzas de la materia que rigen en el universo, de átomos, absurdo. De modo que no debemos buscar en la Biblia lo que no hay, ya que no sería comprensible para aquellos a quienes se dirigía.

El Génesis nos dice de una manera muy poética lo que era importante para la gente de aquel entorno y de aquel tiempo, que todo cuanto hay de bueno y de orden en el universo viene de Dios y que todo está dirigido al bien del hombre, porque el universo está hecho para nosotros, para que nosotros podamos conocer a Dios y finalmente participar también de su vida y de su felicidad.

Lo explica como una historia, cuento, parábola, etc. de un padre que prepara una casa para sus hijos. La Biblia nos dice como Dios prepara el universo para que sea la casa del ser humano que va a ser imagen viviente de Dios.

Y así en esos seis días de la creación hay tres días en que se prepara el terreno y el entorno para la casa y otros tres días en que se amuebla.

El primer día todo es un caos y para un israelita el caos por excelencia era un mar alborotado, de modo que lo primero que hay es un mar tenebroso, oscuro y todo alborotado. Por lo tanto, el primer paso del creador es decir que haya luz, y Dios hace la luz ¿Y de dónde viene la luz? Pues no hay estrellas, no hay sol. Para aquella gente no importaba, Dios puede hacer que haya luz, ¿por qué ha de ser del sol o de las estrellas? Ya tenemos la luz y Dios separa un período de luz de un período de tinieblas. El primer día está concluido.  Y ¿qué es un día? Pues un periodo de luz seguido de un periodo de tinieblas ¿tiene que tener 24 horas? No, eso no era importante.

Al inicio del segundo día todo está revuelto, hay que hacer un hueco en ese mar tenebroso. Los antiguos tenían una idea muy poética de que llueve porque hay agua allá arriba y se cae y que se hace un pozo y aparece agua porque hay agua allá abajo. Parece como si el mundo fuera una especie de cueva dentro de un entorno de agua.  Pero para que haya ese espacio libre hay que hacer una bóveda, que no se ve porque es transparente, pero que separa las aguas de arriba para que no caigan y otro lugar abajo para que quede el resto del agua. Esto se hace el segundo día.

El tercer día por ahora solo hay agua y esa bóveda con más agua encima. Hay que hacer un lugar seco. Para los antiguos, que no conocían que los continentes se mueven y que cambian las cuencas de los océanos etc., el mar está donde está porque Dios le da una orden, ese es su sitio, y separa las aguas quedando tierra seca y los océanos. Y en esa tierra seca Dios comienza poniendo hierba, porque la hierba va a ser necesaria para que pueda luego haber animales.

En el cuarto día Dios empieza a decorar la casa. Lo primero que hace es poner unas lámparas bonitas en el cielo, el sol para que presida al día y a la luna para que presida a la noche y las estrellas. Todo eso está en esa bóveda transparente. Las estrellas y el sol y la luna eran importantes para los israelíes porque se dan cuenta de que no era verdad que las estrellas y los astros fuesen dioses, que no era verdad que dirigían los destinos humanos, que toda la astrología es puro cuento, que los astros son servidores de Dios y servidores del hombre, que sirven para que haya estaciones, para marcar un calendario con fiestas religiosas y que pueda haber orden en la vida. Y por fin cuando ya está preparado el lugar entonces Dios hace los animales primero en el agua y en el aire luego en la tierra y cuando todo está preparado entonces puede ya hacer al hombre a su imagen y semejanza.

De modo que es una historia, cuento, parábola, o como queramos llamarlo, de como Dios hace todo con un orden, para bien de hombre. Esto está en contraposición a todo lo que decían los paganos, que la tierra era lo más primitivo, que de la tierra nacían los dioses, que los dioses no tenían omnipotencia que no eran tampoco capaces de soportarse unos a otros y tenían luchas. Todo ello queda borrado de este modo tan hermoso de la Biblia, hablar de como Dios crea todo para bien del ser humano, para nuestro bien, porque nosotros somos los únicos que conocemos a Dios y obramos libremente y por eso somos y fuimos creados a su imagen y semejanza.

Padre Manuel Carreira, teólogo, filósofo y astrofísico

domingo, 28 de septiembre de 2025

SAN MIGUEL ARCÁNGEL


Celebramos la festividad de nuestra Patrono San Miguel Arcángel. Como viene siendo desde el 2018, nuestra Patrona, la Virgen de los Liñares nos acompaña en la Iglesia para estos días de fiesta, para procesionar junto a San Miguel después de la Misa solemne por los lugares de costumbre. También entregamos el reconocimiento al vecino del año, durante el concierto posterior a la Misa y que este año se le ha otorgado a los miembros de Cáritas parroquial saliente por su servicio y cuidado de los mas necesitados, a título póstumo al arquitecto Tomás Pérez-Lorente Quirós por su generosidad y a Gilberto Costas por su gran labor con los jóvenes y el deporte, llevando el nombre de San Miguel de Oia a nivel nacional e internacional.

San Miguel es uno de los tres arcángeles mencionados en la Sagrada Escritura, junto con Gabriel y Rafael. Su nombre significa “¿Quién como Dios?”, una expresión que proclama la grandeza del Señor y la humildad de sus servidores.

En la Biblia, aparece como un defensor del pueblo de Dios y jefe de los ejércitos celestiales. En el libro de Daniel, se le describe como el protector de Israel, el que lucha contra las fuerzas del mal y sostiene a los fieles en la prueba. En el Apocalipsis, se narra la gran batalla en la que Miguel y sus ángeles vencen al dragón, símbolo de Satanás, expulsándolo del cielo.

La tradición cristiana lo presenta como el guardián de la Iglesia y el que acompaña a los fieles en la hora de la muerte, conduciéndolos hacia la presencia de Dios. También se le invoca como defensor contra las tentaciones, las adversidades y los peligros espirituales.

El culto a San Miguel se extendió desde los primeros siglos del cristianismo. Numerosos santuarios le han sido dedicados, como el Monte Gargano en Italia y el Monte Saint-Michel en Francia. Su fiesta se celebra el 29 de septiembre, junto con los arcángeles Gabriel y Rafael.

San Miguel es representado habitualmente como un guerrero celestial: con armadura, espada o lanza en mano, y bajo sus pies el demonio derrotado. Esta imagen recuerda la victoria de la luz sobre las tinieblas y de la gracia sobre el pecado.

La Iglesia ha difundido oraciones en su honor, especialmente la célebre oración compuesta por el papa León XIII, en la que se pide a San Miguel que defienda a los fieles en la lucha contra las fuerzas del mal.

Para los cristianos, San Miguel Arcángel es un modelo de fidelidad y fortaleza. Su misión es recordarnos que la verdadera victoria no está en la fuerza humana, sino en la confianza plena en Dios. Invocarlo es pedir ayuda para vivir en la verdad, resistir al mal y permanecer firmes en la fe.

Así, San Miguel continúa siendo un compañero de camino para la Iglesia, un signo de esperanza y un poderoso intercesor que nos anima a proclamar con nuestra vida: “¿Quién como Dios?”

Oración a San Miguel Arcángel

"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha.
Sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio.
Que Dios manifieste sobre él su poder, es nuestra humilde súplica.
Y tú, oh Príncipe de la Milicia Celestial,
con el poder que Dios te ha conferido,
arroja al infierno a Satanás, y a los demás espíritus malignos
que vagan por el mundo para la perdición de las almas”.

Amén.

 

Papa León XIII

 

martes, 23 de septiembre de 2025

SAN PÍO DE PIETRELCINA (PADRE PÍO)

 

Hoy celebramos la memoria del Padre Pio. En nuestra Diócesis hay una capilla en Priegue (Nigrán) que está dedicada a este santo, y aunque la devoción al Padre Pio es muy grande dado que es el santo patrón de los adolescentes, los voluntarios de defensa civil de quienes buscan alivio del estrés y de los enfermos y sufrientes hospitalarios, es la única que existe en Galicia y de las pocas que existen en España.
 
San Pío de Pietrelcina (Padre Pío) nació el 25 de mayo de 1887 en Pietrelcina, un pequeño pueblo del sur de Italia, en el seno de una familia humilde y profundamente religiosa. Su nombre de nacimiento fue Francesco Forgione. Desde temprana edad manifestó una gran inclinación espiritual, mostrando deseos de consagrarse a Dios. A los 15 años ingresó en la Orden de los Frailes Menores Capuchinos y adoptó el nombre de Fray Pío.

Fue ordenado sacerdote en 1910. Poco después, comenzaron a manifestarse en él fenómenos místicos extraordinarios, como visiones, éxtasis y sufrimientos corporales. En 1918, recibió los estigmas de Cristo, heridas visibles en manos, pies y costado, que conservó durante 50 años, convirtiéndose en el primer sacerdote en la historia de la Iglesia que los recibió de forma permanente.

Padre Pío vivió la mayor parte de su vida en el convento de San Giovanni Rotondo, donde ejerció un intenso ministerio de confesión, dirección espiritual y celebración de la Eucaristía. Su confesionario se convirtió en un punto de peregrinación, pues se le atribuía un don especial para leer los corazones y guiar a los penitentes. Pasaba hasta 15 horas diarias confesando, y miles de personas viajaban desde todo el mundo para hablar con él.

También se le atribuyeron múltiples milagros, como curaciones inexplicables, bilocaciones, y profecías. No obstante, durante su vida fue objeto de controversias. La Iglesia realizó varias investigaciones, y por un tiempo se le impusieron restricciones a su ministerio. Con el tiempo, sin embargo, fue plenamente rehabilitado y reconocido por su santidad.

En 1956 fundó el "Hospital Casa Sollievo della Sofferenza", una obra médica destinada a aliviar el sufrimiento de los enfermos, considerada uno de los hospitales más avanzados de Italia en su tiempo.

Padre Pío falleció el 23 de septiembre de 1968, a los 81 años. Su muerte fue llorada por miles de fieles que lo consideraban un santo en vida. En 1999 fue beatificado por el papa Juan Pablo II y canonizado por el mismo pontífice el 16 de junio de 2002. Su fiesta litúrgica se celebra el 23 de septiembre.

Hoy, San Pío de Pietrelcina es uno de los santos más venerados del mundo católico. Su vida fue un testimonio de fe, humildad, obediencia, sufrimiento ofrecido por amor a Dios y un compromiso incansable con la oración y la caridad.

Oración al Señor por intercesión de San Pio de Pietrelcina

"Oh Dios, que a tu siervo San Pío de Pietrelcina le concediste el insigne privilegio de participar de la pasión de tu Hijo: concédeme por su intercesión la gracia de … [menciona tu petición], que ardientemente deseo, y otorgarme, sobre todo, la gracia de conformarme a la muerte de Jesús para alcanzar la gloria de la resurrección"

 

domingo, 21 de septiembre de 2025

BAJO TU AMPARO

 

Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios; no deseches las súplicas que te dirigimos en nuestras necesidades; antes bien, líbranos siempre de todo peligro, ¡Oh Virgen gloriosa y bendita!

Es la primera oración dirigida a María, conocida en la actualidad, está escrita en griego y se llama Sub tuum praesidium (Bajo tu protección). En ella, a la Virgen María se le llama "theotokos", es decir, la "Dadora de nacimiento de Dios", "la Madre de Dios" y es una referencia bastante importante desde un punto de vista histórico y teológico.

Esta oración, fue "encontrada en un fragmento de papiro que data de aproximadamente el año 250 dC", solo un par de siglos después de la muerte y resurrección de Cristo, aproximadamente un siglo antes de Constantino y el Edicto de Milán, dos siglos antes del Tercer Concilio Ecuménico, el Concilio de Éfeso, en el cual la Virgen María fue proclamada oficialmente, por primera vez, "Madre de Dios", Theotokos.

Este papiro demuestra que ya existía una devoción a María desde los primeros cristianos, su creencia en su poderosa intercesión y su papel como intercesora ante Dios quienes la reconocían como Madre de Dios. Actualmente, es un himno muy utilizado en la Iglesia en las liturgias católicas.

Resulta impresionante rezar esta oración, sabiendo que los cristianos la rezaban ya, por lo menos, en el año 250 d.C., que es la fecha en que se dató el papiro en el que se encontraba.

Nosotros no la hemos recibido de los arqueólogos, sino de la tradición de la Iglesia, a través del latín en el caso de la Iglesia Latina o del griego y el eslavonio antiguo en Oriente.

Resulta agradable, sin embargo, que la arqueología nos muestre una vez más que la tradición no es algo inventado, sino que verdaderamente nos transmite la herencia que los primeros cristianos recibieron de Cristo y de los Apóstoles.

Fuentes:

https://es.catholic.net/op/articulos/61850/cat/70/la-oracion-mas-antigua-dirigida-a-la-virgen-sub-tuum-praesidium.html#modal

https://es.aleteia.org/2019/08/16/este-papiro-contiene-la-oracion-mariana-mas-antigua-conocida-hasta-la-fecha/

 



sábado, 20 de septiembre de 2025

LA SEÑAL DE LA CRUZ

 

La cruz es el símbolo por excelencia de la religión cristiana; una fe basada en el sacrificio de Jesucristo, quien se dejó crucificar para pagar por los pecados de las personas y, con el gesto, redimir a la humanidad. Por ello, lucir colgada la cruz en el pecho es, a ojos de muchos cristianos, lo más natural del mundo, ya que alude a la dignidad de su religión

Santiguarse, signarse y persignarse son actos muy frecuentes entre los cristianos, pero que muchos confunden y mezclan. Así, santiguarse, signarse y persignarse es hacer una cruz, si bien el sentido varía en función de cómo y dónde se haga.

Santiguarse es hacer la cruz grande (de frente al vientre y de hombro a hombro) diciendo "En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo Amén". Esto implica una invocación a la Santísima Trinidad y una entrega total a la voluntad de Dios. Uno se santigua a inicio de la misa, por ejemplo, o al pasar frente a una iglesia o al comenzar un rezo cuando va a empezar el día.

Signarse son tres cruces pequeñas sobre la frente, los labios y el pecho diciendo "Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor Dios nuestro". Es una petición a Dios para que proteja la mente, la palabra y el corazón, librando de pensamientos negativos, palabras hirientes y malas acciones. El signarse se hace antes de proclamar el evangelio en la misa, en la frente para predisponer nuestra mente a la escucha atenta del mismo, en la boca para que sepamos anunciar el evangelio, y en el pecho para ser custodiado con amor y fe. Todo de cara a permitir que el Evangelio que se proclama se haga vida en nosotros y dé los debidos frutos

Persignarse es la combinación de ambas: primero las tres cruces pequeñas del signarse y luego la cruz grande del santiguarse. Combina la protección para la mente, la palabra y la acción (del signarse) con la invocación a la Trinidad y la entrega a Dios (del santiguarse). Uno se persigna en el comienzo de las oraciones que se dicen a comienzos del Santo rosario con el viacrucis y las novenas.

domingo, 14 de septiembre de 2025

NUESTRA SEÑORA DE LOS LIÑARES

     

Hoy celebramos la fiesta en Honor a Nuestra Señora la Virgen de los Liñares. Una fiesta entrañablemente familiar, donde, como cada año, reúne a tantas familias de la parroquia, que en torno a la mesa recuerdan a los que nos han dejado. Dia para acercarse a la Capilla de la Virgen para rezar y pedir su intercesión para todo lo que nos preocupa, acompañarla en procesión alrededor de la Capilla y disfrutar de un día de amistad y fraternidad. Seguro que ella nos escucha. Muchos son los que se encuentran este día tras un año sin haberse visto, manteniendo así un lazo que la Virgen mantiene.

Dediquemos un minuto de nuestro tiempo para elevarle una pequeña oración:

Madre de misericordia, Virgen de los Liñares, pongo en tus manos mi vida, mi amor y todo lo que soy.

Te consagro mis trabajos, mis alegrías, mis dolores y mis preocupaciones.

Ayúdame a vivir en fidelidad a tu Hijo, Jesús, y guíame por el camino de la paz y la esperanza.

Te pido que protejas mi familia, que nos des la gracia de respetar y amar la vida, como tú amaste la vida del Hijo de Dios.

Te ruego que bendigas la educación de mis hijos y nos concedas la unidad y el amor en nuestro hogar.

Madre Santa, enséñame a acercarme siempre a Jesús, a buscar su perdón cuando caigo y a recibir los sacramentos con devoción.

Dame la paz de un corazón limpio y libre de maldad, para que pueda llevar la verdadera alegría y paz a los demás.

 Que tu amor me sostenga y me guíe siempre hacia tu Hijo, para que viva en su luz y en su gracia.

Amén.


FGM

sábado, 13 de septiembre de 2025

NOVENA A LA VIRGEN DE LOS LIÑARES

Previamente a la fiesta en Honor a la Virgen de los Liñares, hemos tenido la celebración del Rosario y la Novena a la Virgen, en los cuales hemos pedido a Nuestra Señora de los Liñares en los distintos días por los sacerdotes y personas de vida consagrada, por los trabajadores, por los enfermos, por los países oprimidos, por los pueblos que sufren la pobreza, el hambre y desastres naturales, por el cuidado de la tierra, por los cristianos perseguidos y en dificultades, por las familias y por todos los devotos de la Virgen de los Liñares, vivos y difuntos. 

Así mismo, hemos meditado sobre las virtudes de la Virgen María basados en las reflexiones del grupo de jóvenes de Misión País que nos acompañaron este verano.

María, Madre de Jesús, es el modelo más perfecto de virtudes cristianas. Su vida refleja las actitudes fundamentales que un creyente está llamado a imitar.

La humildad es el fundamento de todas sus virtudes: aunque llena de gracia, se reconocía pequeña y dependiente de Dios, respondiendo siempre con un “sí” confiado. Rechazaba alabanzas y dirigía toda gloria al Señor, tanto en la Anunciación como en la Visitación, y especialmente al pie de la cruz.

El amor a Dios en María fue total, cumpliendo de manera perfecta el mandamiento de amar con todo el corazón. Su relación con la Trinidad –Hija del Padre, Madre del Hijo y Esposa del Espíritu Santo– muestra su entrega plena y amorosa.

De ese amor brota la caridad con el prójimo. Sirvió a Isabel con generosidad, se preocupó de los novios en Caná y continúa intercediendo por nosotros. Su compasión es reflejo del corazón de Cristo.

La fe de María fue firme y luminosa: creyó en las promesas de Dios aun sin ver. Supo reconocer a su Hijo como Dios en cada circunstancia, desde Belén hasta el Calvario, permaneciendo siempre fiel.

La esperanza de María se apoyó en la confianza absoluta en la Providencia. En momentos de incertidumbre, pobreza o huida, esperó en las promesas divinas, y sobre todo en la resurrección de su Hijo.

La pureza de María, en cuerpo y espíritu, fue fuente de fidelidad y castidad. Se entregó plenamente a Dios y es modelo para jóvenes, esposos y consagrados, recordándonos que el cuerpo es templo del Espíritu Santo.

Su pobreza no fue solo material, sino sobre todo espiritual: desprendida de todo, tuvo a Dios como único bien. Nos enseña a vivir libres de apegos, con un corazón disponible para Él.

La obediencia de María es ejemplo de docilidad a la voluntad de Dios. Desde la Anunciación hasta el Calvario, aceptó con fe y amor los designios divinos, incluso en el dolor más grande.

La dulzura tiene origen en la bondad que derrama el corazón. La bondad del corazón de la Madre es enorme porque su fuente es inagotable, es el mismo Dios. No hay consuelo humano más grande que la ternura del corazón dulce de Nuestra Madre, que nos llama sin descanso a volver a su Hijo. 

Finalmente, la oración fue el pilar de su vida. Amaba el silencio, cultivaba la intimidad con Dios y halló en la oración la fuerza para cumplir su misión y permanecer junto a Cristo hasta la cruz.

Así, María es modelo de humildad, amor, fe, esperanza, pureza, pobreza, obediencia y oración. Su vida enseña que la verdadera grandeza está en el servicio, la confianza y el abandono total en Dios. Ella nos invita a imitar sus virtudes para crecer en santidad y alcanzar la vida eterna.

miércoles, 10 de septiembre de 2025

PRIMER SANTO CRISTIANO VENERADO POR LA IGLESIA

 

Hemos asistido estos días a la canonización de dos jóvenes, Carlo Acutis (15 años) y Pier Giorgio Frassati (24 años). Carlo Acutis es el primer santo milenial, la persona contemporánea más joven en alcanzar la santidad en la Iglesia católica, podríamos decir casi con total seguridad que es el primer santo al que sus padres y hermanos asisten a su canonización. Muchos primeros.

También conocemos quien fue el santo que menos tiempo tardó en ser canonizado, Pedro de Verona también conocido como San Pedro Mártir, que fue canonizado a los 337 días después de su muerte.

El primer mártir cristiano fue San Esteban, conocido como el "protomártir" que fue acusado de blasfemia, llevado ante el Sanedrín y finalmente lapidado hasta la muerte por su valiente defensa de la fe en Jesús.

Pero ¿conocemos quién fue el primer santo cristiano que venera la Iglesia Católica?

Es San Dimas, también conocido como el buen ladrón (uno de los dos ladrones que fue crucificado junto a Jesús), a diferencia del otro ladrón crucificado, imploró a Jesús: “Acuérdate de mí cuando llegues a tu Reino”, a lo que el Señor contestó: “Hoy estarás conmigo en el Paraíso” (Lc 23, 39-43). Dimas nunca fue “canonizado” de manera formal por la Iglesia. Se le cuenta entre los santos porque ha sido la única persona a quien Jesucristo aseguró explícitamente que estaría en el cielo, compartiendo su gloria, así como el único que fue canonizado en vida. 

Es claro que San Dimas, el buen ladrón, reconoció, en un acto de fe verdadera, al Hijo de Dios. Haberlo hecho lo condujo en seguida a admitir con humildad su pecado, y pedir misericordia.

Si bien no hay certeza sobre su nombre, sí la hay sobre su destino. Que haya vivido como ladrón o criminal para después acogerse a la misericordia del Señor, termina siendo motivo de inspiración y de esperanza para todos los hijos de la Iglesia, porque somos pecadores.

Es el patrón de los prisioneros y los moribundos. También fue nombrado patrono del gremio de los anticuarios, por ser el santo más antiguo de la Historia.